Desde tres puntos del país, Monteros (Tucumán), Itatí (Corrientes) y Rosario (Santa Fe) vienen Marcela Sueldo, Richar De Itatí y Xil Buffone, quienes recuperan el valor de la destreza manual a través de las técnicas del encaje de la randa tucumana, de la cerámica guaranítica y de la pintura. En tiempos de premura, velocidad y virtualidad seguimos creyendo en el trabajo paciente y minucioso demandado por cada una de las técnicas y apoyamos la materia natural: el barro del río Paraná, el algodón del encaje y las telas de tapicería. Además, elegimos artistas que interrogan desde su sensibilidad y espiritualidad a una sociedad acechada y dominada por el consumo. Richar nació en el pueblo de Itatí, centro de peregrinaje de la provincia de Corrientes. La figura de la Virgen es parte de su ser y fortalece la devoción mariana mientras rescata una antigua técnica guaraní de rollizo superpuesto con barro del río Paraná. En la ciudad de Monteros, Marcela Sueldo continúa la tradición del tejido de encaje conocido como randa, que data de tiempos de la colonia. Los hilos delicados de algodón se entrelazan en intrincados diseños geométricos o en las imágenes realizadas especialmente para acompañar la figura de la Virgen de Itatí, la de Luján (ambas del siglo XVIII) y a Mama Antula (1730-1799). En tanto, para Xil Buffone, quien creció en Rosario también a orillas del Paraná, no hay diferencia entre orar y pintar. Así lo hace con la representación de la argentina Mama Antula, canonizada en 2024. Comenzamos la muestra en el mes de diciembre cuando se festeja el día de la Virgen y culminamos en marzo, el mes de la mujer. Al respecto, dice Gabriela Campo: “Estamos articulando tres miradas sobre la espiritualidad y la sacralidad con tres técnicas diferentes. En sus obras, nuestros artistas humanizan a vírgenes y santas, las bajan del cielo a la tierra y las celebramos desde la maternidad en diciembre (Navidad), la Pachamama en febrero (Madre tierra) y la mujer luchadora por su identidad y sus derechos, en marzo.” Tres rostros femeninos de lo sagrado con la cercanía que es capaz de lograr el arte.